Tras el necesario y valioso parón vacacional veraniego, reaunudamos las publicaciones del blog, con una foto real que debe ayudar en la concienciación de una adecuada gestión de los riesgos laborales en las empresas.
Como podemos observar, en este caso se da un cumplimiento "formal" de la Ley de Prevención. Los trabajadores han sido equipados con EPIs adecuados como chaleco, cascos y botas, pero en la empresa no hay una verdadera cultura preventiva.
Esto se refeleja en que podemos observar las siguientes deficiencias desde el punto de vista de la seguridad y salud laboral de la obra:
- Andamios inadecuados. La normativa sólo obliga a la instalación de andamios homologados para andamios que superan los 2,5 mts de altura, y por otra parte los trabajadores parecen estar a una altura inferior. Pero, para mejorar la seguridad de una tarea habitual en la obra, es necesario la instalación de un andamio que cuente con todas las garantías de seguridad -perimetro vallado, estabilidad, etc-. Para este caso hubiera sido mejor utilizar un andamio móvil o una plataforma elevadora en correctas condiciones.
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No se utiliza arnés o cinturón de seguridad. Muy recomendable, sobre
todo en casos como éste, en el que se permanece en andamios que no
disponen de ningún tipo de cerramiento o valla de seguridad.
- Orden y limpieza. A primera vista se observa el desorden de la obra, la acumulación de materiales en sitios inadecuados, como el propio entorno del andamio, que agravaría las consecuencias de una posible caída en altura de personas.
- Relajación de las medidas de seguridad en la obra. En las fases finales de las obras, se producen tareas de acabados finales y repasos, donde suele producirse una relajación en el control de la seguridad en obra, al creerse ya eliminados los riesgos más importantes. Por ello, en algunas empresas los encargados y jefes de obra dejan de cumplir sus funciones respecto a la seguridad laboral. A ello se une, el progresivo recorte en el presupuesto de la obra, que hace que numerosos equipos sujetos a contratos de alquiler -como plataformas elevadoras o andamios-, sean eliminados progresivamente de la obra. La suma de carencia de medios, relajación del control y necesidad de realizar los trabajos supone que en estas fases ocurran numerosos accidentes de trabajo.
Como hemos visto, aunque los trabajadores vayan correctamente vestidos con sus valiosos EPIs, están expuestos a numerosos peligros todavía existentes en la obra. Es necesario mantener el mismo criterio preventivo desde el inicio al fin de los trabajos. Los riesgos deben ser controlados en todas las fases de la obra.
